lunes, julio 04, 2011

Hace mucho frío.

Estos días está haciendo muchísimo frío.
Hoy vinieron bastante pocos al comedor, unos treinta y siete. Ojalá sea porque se quedaron abrigaditos bajo techo en algún lugar. Pero no estoy muy segura.
A los primeros, mientras estaban en la cola, pudimos servirles un vaso de chocolatada caliente porque sobró del sábado. Los lunes a veces podemos darnos ese gustito.
Sabemos que los días de lluvia, en los paradores del estado, los dejan quedarse -si no los hacen salir muy temprano y pueden volver al caer la tarde- y les sirven cosas calientes. Ojalá con mucho frío también sea así.
Da mucha pena de todos modos.
¿Cuándo tendremos un mundo en que todos tengan casa y comida digna? En éste son muchos los que no las tienen.
¿Cuál es nuestra responsabilidad?

4 comentarios:

Pablo Muttini dijo...

Jose, a nosotros también, en Martínez, nos vinieron muy pocos muchachos el sábado. Pregunté y efectivamente, me contaron que en el parador los dejan quedarse cuando es así. Hace mucho frío. No se puede dejar de pensar en ellos por las noches. Nosotros el viernes prendimos la calefacción de la capilla y abrimos el sábado una hora y media antes para ir recibiendo a los muchachos que se adelantaban.
No podemos dejar de soñar con lo que planteas en tu último párrafo.
Ando con un proyecto entre manos; ni bien tenga aspecto de cuajar te aviso.
Abrazo
Pablo

AleMamá dijo...

Mi madre ha sido voluntaria en un comedor de caridad como el tuyo. Es de la Fundación Las Rosas donde cuidan viejos. Ahí todo es puesto por la Divina Providencia y así se llama: Comedor de la D.P

Fernando dijo...

Hermana, me hizo gracia lo de "paradores del Estado", sitios para que vaya la gente pobre sin hogar: en España es una cadena muy buena de grandes hoteles, propiedad del Estado, muchos de ellos en antiguos palacios o conventos.

Mento dijo...

Todos deberiamos pararnos hermana y hacer un gran paretesis donde analizar con proposito de enmienda y asumir que parte de culpa nos corresponde. Si cada uno hiciera eso... Se podria cambiar. Dicen que es una autopia, yo creo que cuando algo se quiere de verdad se puede, por eso no me canso de rezar y pedirle al padre que nos de un poco de conciencia y de caridad a cada uno.
Un abrazo, y gracias por la labor que desempeñan. Saludos a las demas hermanas y colaboradores.