sábado, marzo 21, 2009

Del ejecutivo y el legislativo.

En nuestro país –Argentina, no el Uruguay que es donde vivo- se usa que, para quitar un ministro de su cartera, se le ofrece la candidatura a una banca legislativa; o si alguien tiene ambición política intenta acceder a una cámara para empezar su carrera…
Muchas veces me he cuestionado esto.
Creo que el perfil a tener para ser un buen legislador no es el mismo que se requeriría para ser un ministro. No creo, francamente, que dé todo lo mismo.
Me parece que tendríamos un país distinto si buscáramos seriamente las personas idóneas para una función o la otra.
Así también cambiarían otras cosas; por ejemplo la propia gestión legislativa o la ejecutiva. Y serían realmente complementarias.
¿Se imaginan un legislador que no fuera un mero repetidor de las órdenes del ejecutivo? ¿Y un ministro con una clara capacidad ejecutiva? Por supuesto que, entre tantos, algunos ejemplos tenemos hoy, pero no son los más.

5 comentarios:

Jorge S. King dijo...

Hermanita, el enojo que tengo con la "clase" política es tan grande que,....mejor no opino.
Saludos Santiagueños!

Cecilia dijo...

Totalmente de acuerdo!!!
Nada de publicidad estilo "la vida de tus sueños". Hay que analizar a cada candidato, si es posible que ejerza la función para la que se postula.
Creo que muchas veces compramos una linda novela armada por los medios publicitarios, pero cuando "cae el maquillaje" la realidad es otra.

ALMA dijo...

Totalmente de acuerdo Hermana.
Todo político devenido en desgracia en su cargo aparece como Legislador por los fueros,claro y eso no lo entiendo.
Tampoco entiendo que una persona pueda ser ministro de economía, luego pasar por trabajo para seguir como secretario de estado de cultura y terminar siendo Legislador en la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto.
No discuto que tengamos personas sumamente capaces e instruídas, pero... pueden abarcar con idoneidad tantas cartera? mmmm ...es una duda, simplemente una duda
Buen post, Hermana

Natalio Ruiz dijo...

Completamente de acuerdo hermana.

Pero parece que seguirá siendo así, y el legislador que quiera votar según su criterio será llamado traidor y comparado con Judas.

Ya vendrán tiempos mejores....

Respetos.

Natalio

Lola dijo...

Hola. Encantada de encontrar este blog.
Estoy totalmente de acuerdo con la proposición, pero lamentablemente además de que cuando un ministro empieza a molestar en el gabinete lo solucionan mandandolo a presentarse a elecciones, también las elecciones legislativas sirven como un ensayo a prueba y error de cómo saldrían en elecciones más importante. Lo importante es ganar, no importa a qué.
Cariños