El otro día escuché un episodio sobre Gandhi, muy sencillo pero enseñador:
Subía a un tren con algunos de sus discípulos y, al hacerlo, se le enganchó una de las sandalias que se cayó al andén. Sus seguidores intentaron recuperarla pero, como el tren partía, no pudieron.
Al enterarse Gandhi, que ya estaba arriba, se sacó la otra y la tiró por la ventanilla.
Ante el asombro de los demás les explicó:
- Ya que no podré tenerlas yo, al menos que el que la encuentre tenga las dos; así podrá usarlas.
Sentido común. Pero, además, capacidad pensar en el otro y también lucidez.
8 comentarios:
Parafraseando la propaganda (que no sé si está en Uruguay): es simple, es claro.
Tiene la belleza de lo sencillo.
Respetos.
Natalio
Sin dudas, fue un gran maestro.
Saludos Santiagueños.
Coincido con Natalio, simple! Directo y simple.
Ciertamente algo de sentido común, pero también una gran capacidad de amor, de "reflejo de amor". Cuántas veces tenemos el sentido común y la capacidad de compartir, pero le damos tantas vueltas a las cosas que para cuando se nos ocurre darnos o compartir algo... la ugencia del otro ya pasó.
Que podamos ser rápidos y simples y claros en nuestras respuestas de amor. Eso deseo.
Muy lindo Josefina, Gracias!
Lucidez, sí, y amor. Porque la lucidez es el amor, me parece.
Un saludo.
Digno del Maestro, pensar en el otro, antes que en si mismo.
Un abrazo hna, y buen fin de semana
Sentido comun y desprendimiento. Buen fin de semana
¿Qué "sandalias" nos tendremos que sacar?
Besos!
Eso se llama inteligencia, no sé si emocional, anímica, o qué... pero sin duda alguna nos muestra cómo obtener el mejor resultado para los demás con actos muy sencillos...
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