jueves, septiembre 24, 2009

Lo de cada día.

Cada vez estoy más convencida de lo que valen –muchísimo- las cotidianidades, las cosas pequeñas de cada día. Lo que pasa que no son fáciles de contar:
-¿Qué hiciste hoy?
-¡Nada!, lo de todos los días
( y ¡vaya si hicimos cosas!)
Por eso mi blog está con pocas entradas.

9 comentarios:

Juan Ignacio dijo...

Pero escribí por favor esas nadas, ya que ayudan a vivir la vida y que no se pase volando.

AleMamá dijo...

Bendita normalidad, Jo, que lo contrario es generalmente calamidades.
Besos, querida amiga

Jorge S. King dijo...

Pocas, pero más que muy buenas.
Saludos Santiagueños

Fernando dijo...

Querida hermana, yo creo que precisamente esos pequeños hechos cotidianos son los que hacen maravilloso esto de los blogs, y no las grandes reflexiones que leemos a veces.

Hay algo sublime en ir paseando por Madrid y recordar que, hace poco, a una religiosa argentina en Uruguay se le ha muerto una hermana de comunidad; que una señora chilena lleva muchos años casada con su marido; que a una señora argentina se le casa un familiar; que un señor argentino está leyendo un libro sobre la evolución. Esto es algo muy grande, que hace 20 años habría sido impensable.

hna. josefina dijo...

Bueno, en realidad, este blog está básicamente hecho de vida diaria. Lo que pasa es que algunos días, difíciles de contar, y no precisamente por extraordinarios; sobre todo cuando se trata de escribir cortito.
Por otro lado, no hay duda de que son días riquísimos.
Fernando, estoy totalmente de acuerdo con vos de que eso es lo valioso de los blogs, además de poder enterarse cómo piensan todas las personas -y no sólo los periodistas, por ejemplo- los hechos extraordinarios.

Ana dijo...

Mejor pocas pero buenas, y como dijo Ale, preferible la normalidad a la calamidad!

De todos modos para uno siempre lo que le pasa es poco y es lo normal. Y no siempre es TAN así.

Selín dijo...

Un saludo fraterno desde El Salvador, hermana.

Voy a estar atento a sus "cotidianidades"... pienso que hay tanta "extraordinaridad" en la pequeñez, en lo común, que ni nos damos cuenta. "Estad despiertos", nos dice el Maestro.

Selín

Analía dijo...

abrazo para vos!

Anónimo dijo...

Hna. Josefina,
Él cada día está hecho de pequeñas o grandes cosas, la mayor parte de pequeñas cosas. Alegraese de la sonrisa de un niño, recibir o dar una palabra de consuelo, un consejo.
No creo que pueda nadie decir que no hizo !nada! Cada día gracias a Dios hay mucho que hacer.

Saludos cariñosos