lunes, mayo 31, 2010

María visita a Isabel





Hoy conmemoramos esa visita.
Me encanta esta fiesta.
María necesita ir a ver a su prima; ella la comprenderá, y podrán compartir tanta alegría y tanto regalo de Dios:
Para Isabel,la concepción del Bautista.
Para María, para el pueblo de Israel que lo esperaba, y para toda la humanidad, el Mesías anunciado...
Esto último se dice fácil ahora... ¡Pero qué realidad imponente!
O sea, María corre -partió sin demora, dice el Evangelio- a lo de Isabel, a compartir con ella y a ayudarla.

miércoles, mayo 26, 2010

La carta que no se publicó

Un amigo uruguayo me pasó la carta que un sacerdote -amigo suyo-, que es misionero en Angola, mandó al NY Times y que nunca publicaron.
Le pedí permiso para ponerla aquí; pero resulta que ya la sacó Aica por lo que hago directamente el link ahí.
Comienza así:
Querido hermano y hermana periodista:

jueves, mayo 20, 2010

Cansados pero contentos



Estos días, desde el viernes pasado, en el comedor está faltando el cocinero.
Y esto de llamarlo el cocinero es sólo un modo de decir, porque -además de cocinar riquísimo- hace un montón de cosas más ¡Casi imprescindible!
Se resintió un hombro levantando algo pesado, y le han dado varios días de licencia.
Por supuesto que todos estamos poniendo de nuestra parte para reemplazarlo -que es lindísimo también- pero, sin duda, hay mucho más trabajo. Porque además sale mucho más fácil todo cuando uno está acostumbrado y lo tiene organizado; en cambio ahora, en sus cosas, tenemos como que aprender todo. Hablo en plural porque lo estamos supliendo entre varios.
¡Cómo lo extrañamos! Si siempre lo valoramos realmente -no era necesario que faltara para que nos diésemos cuenta cuánto vale- ahora todavía, si se puede, cotiza un poco más.
Por eso no escribo mucho; ni tengo mucho tiempo para visitar blogs.
Esta semana ya se va terminando. La próxima empieza el miércoles, gracias a Dios, porque lunes y martes es fiesta. Recién el viernes deberá volver al médico para ver si ya puede trabajar o seguir de licencia.
En una de esas nos vamos poniendo todos más prácticos y se nos va haciendo más fácil.

martes, mayo 18, 2010

18 de mayo

Hoy es la fiesta de nuestra fundadora: Sta.Rafaela María.
Una gran mujer, y una gran santa. Cuanto más tiempo pasa, más la quiero y la admiro.
Y, además, con una santidad -en mucho- muy apropiada para el tiempo de hoy.
¡Qué lindo regalo tener una fundadora a la que cada vez la sentís más madre y más inspiradora de la propia vida!
¡Ojalá sepa corresponder un poquito a ello!

lunes, mayo 17, 2010

del Comedor.

No sé si ya conté que, porque estamos en un barrio muy especial, en el Comedor somos privilegiadas en cuanto a la cantidad de voluntarios que se nos ofrecen y las donaciones que recibimos.
Al punto de que, cuando nos damos cuenta de que tenemos mucho, tratamos de derivar a otras instituciones no tan afortunadas.
Este último tiempo no es fácil conseguir azúcar; y en todo caso no te venden sino en cantidad limitada. Nosotras no tenemos problema ya que nos donan, cada tanto -todavía no he aprendido cada cuánto-, de a varias bolsas.
El sábado, llamaron de un hogar de niños para ver si podíamos ayudarles ya que se les estaba terminando la que tenían.
Esta mañana me fijé -el cocinero que organiza todo eso, se resintió un hombro y desde el viernes no viene- y me pareció que bien podíamos ceder algunas: ni idea cuándo traerían de nuevo, pero no me pareció guardar nosotros cuando a otros les falta. Más adelante ya veremos; pero tampoco es el caso de que, si damos ahora, nos quedamos sin porque había unas cuantas.
Total que vinieron a buscar tres bolsas.
Hace un ratito pasé por el comedor y, a la siesta, ¡habían traído seis bolsas de azúcar!
---------
Moraleja: Por supuesto que no es bueno acumular cuando le puede venir bien a otro. Porque, además, la Divina Providencia existe.¡No nos cabe duda!

domingo, mayo 09, 2010

Anita





Anoche vimos Anita, con las hermanas.
Una película, con Alejandra Manzo y Norma Aleandro, preciosa.
Creo que tiene más sentido en nuestro país, porque trata del atentado contra el edificio de la AMIA, en esta ciudad; pero creo que es digna de ver, una lección de vida. La recomiendo.
Pero esta entrada es porque encontré un artículo sobre Alejandra Manzo, la protagonista, que me encantó.
Leer aquí.
Esta entrada, María Isabel, me hizo acordar mucho a vos y tus amigos.
¡Un abrazo!

martes, mayo 04, 2010

El regalo de cada día

Esta mañana tuve que salir temprano para hacer un trámite. Por eso le avisé al muchacho que trabaja en el comedor –un puntal: cocina, limpia, organiza, una especie de imprescindible- que tal vez llegaría tarde para ayudarlo.
Después de un rato largo de cola al aire libre, me atendieron muy bien pero debí volverme sin lograr lo que buscaba porque me faltaba un papel.
Cuando llegué a casa me avisaron que la voluntaria que viene los martes a cocinar –el único día que no lo hace Pablo, y aprovecha para preparar un reparto quincenal que hacemos de yerba, azúcar y jabón- está enferma.
Parecía que el día se iba poniendo más complicado.
Llegué al comedor y constaté que ya estaba, igual, todo embarcado: la comida y el reparto. Como digo arriba, nuestro cocinero es una maravilla.
Pero de todos modos, quedaba por delante la mañana, atender, poner y servir las mesas, lavar platos y demás, de las cincuenta y pico de personas que vienen. Gracias a Dios, justo hoy se estrenaba un muchacho que ayudaría a lavar, y era probable que apareciera –más tarde- una señora grande que suele venir los martes… pero, en realidad, por el momento éramos Pablo, una voluntaria –estaba otra más que viene a preparar las bandejitas de los postres, y deja todo listo para los varios turnos, pero se va antes de que comiencen los almuerzos- y yo.
Lo tomamos con naturalidad porque de algún modo nos íbamos a arreglar… siempre hay impredecibles y siempre surge algo.
En eso, cuando estábamos conversando mientras doblábamos servilletas de papel, sonó el timbre. Fui a abrir pensando que era un peregrino que venía a pedir algo, o quizás algún donante; y me encontré con una muchacha joven que me saluda y me pregunta:
- ¡Hola! Vengo para preguntar si no puedo ayudar en algo.
- ¿Estás dispuesta a quedarte ya a darnos una mano?
- Sí, por supuesto.
Antes de que empiecen a trabajar solemos pedirles a los voluntarios que vengan a una entrevista; pero hoy no era el momento. Por supuesto se quedó con nosotros toda la mañana.
¡Ah! Se llama Milagros.
De estos, pequeños ‘milagritos’ que nos cambian la vida, ¡tenemos a cada rato!

domingo, mayo 02, 2010

Una monjita, testigo de los dos centenarios


Es parte del título, del diario Clarín -con una gran tirada en el país-, a nuestra hermana Angélica que tiene 106 años.
Les paso el link, porque está muy lindo, y tal cual Angélica: Aquí