sábado, julio 11, 2009

Espigando la nueva Encíclica de Benedicto

"En sí misma considerada, la técnica es ambivalente. Si de un lado hay actualmente quien es propenso a confiar completamente a ella el proceso de desarrollo, de otro, se advierte el surgir de ideologías que niegan in toto la utilidad misma del desarrollo, considerándolo radicalmente antihumano y que sólo comporta degradación. Así, se acaba a veces por condenar, no sólo el modo erróneo e injusto en que los hombres orientan el progreso, sino también los descubrimientos científicos mismos que, por el contrario, son una oportunidad de crecimiento para todos si se usan bien. La idea de un mundo sin desarrollo expresa desconfianza en el hombre y en Dios. Por tanto, es un grave error despreciar las capacidades humanas de controlar las desviaciones del desarrollo o ignorar incluso que el hombre tiende constitutivamente a «ser más». Considerar ideológicamente como absoluto el progreso técnico y soñar con la utopía de una humanidad que retorna a su estado de naturaleza originario, son dos modos opuestos para eximir al progreso de su valoración moral y, por tanto, de nuestra responsabilidad." (Benedicto XVI, Caritas in veritate)

3 comentarios:

Juan Ignacio dijo...

(...) es un grave error despreciar las capacidades humanas de controlar las desviaciones del desarrollo o ignorar incluso que el hombre tiende constitutivamente a «ser más».

Este fragmento está remarcado en mi ejemplar. Muy bueno y me alegro que coincidamos en los que nos llama la atención.

ALMA dijo...

Gracias Hermana por hacerme conocer este texto, que merece ser meditado.

Un beso

Ana dijo...

Vaya si que tiene que ver con lo que hablábamos el otro día!

Gracias por avisarme, vale realmente la pena.

Un beso grande!